Sí, lo sabemos… cada vez aparecen más ingredientes “imprescindibles” y es difícil elegir y saber cuál es el idóneo para tu tipo de piel y necesidades. Pero si lo que buscas es un ingrediente eficaz, que hidrate tu piel y mantenga su buen aspecto, tenemos la solución: los proteoglicanos.
Proteo… ¿qué? Quizá sea la primera vez que lo lees o tal vez ya te suene la palabra “proteoglicanos” pero no tienes claro qué son. Queremos explicarte qué es este ingrediente que está de moda y cuáles son los efectos positivos que tiene para tu piel. Estamos seguros de que después de leer este post vas a convencerte de incluir los proteoglicanos en tu rutina de cuidado.
¿Qué son los proteoglicanos?
Son macromoléculas naturales que se encuentran en nuestra piel formando parte de su estructura celular. Su función es comunicar las células con el exterior, restaurar las células epidérmicas e intensificar el metabolismo de los componentes del tejido conjuntivo. Esto los convierte en una fuente de hidratación, firmeza y elasticidad para la piel.
Su gran capacidad de hidratación es su beneficio más destacable puesto que son capaces de captar y retener hasta 1.000 veces su peso molecular en agua, manteniendo el nivel de hidratación natural de la piel.
¿Qué acciones desempeñan los proteoglicanos?
- Activan la producción de colágeno: Mejoran la elasticidad y firmeza de la piel al estimular la síntesis de colágeno. Esto ayuda a reducir la apariencia de líneas finas y arrugas y a ver nuestra piel más tersa.
- Regulan el contenido acuoso del tejido: Regulan el nivel de hidratación en la piel y la capacidad de la misma para retener agua. De esta manera se consigue un equilibrio óptimo de humedad en la piel.
- Retienen y atrapan las moléculas de agua: Tienen capacidad de retener el agua por lo que son capaces de proporcionar una hidratación profunda y duradera, dejando la piel nutrida, suave y radiante.
- Aceleran los procesos de cicatrización: Favorecen la recuperación de la piel dañada acelerando los procesos de cicatrización.
- Incremento del metabolismo celular: Estimulan la renovación de las células de la piel con lo que se consigue una piel más saludable y con un aspecto más rejuvenecido.
Por todo ello, los proteoglicanos son un activo cada vez más utilizado en cosmética, especialmente en aquella dirigida a las pieles más maduras y a mitigar los efectos del envejecimiento en la piel.
¿Por qué incluir los proteoglicanos en tu rutina de cuidado?
Los proteoglicanos se suelen incluir en productos como ampollas y sérums por lo que es fácil integrarlos en tu rutina de cuidado, después de limpiar la piel y antes de utilizar la crema hidratante.
Además, se pueden utilizar no sólo en el rostro, sino también en cuello y escote, permitiendo que también se noten los efectos positivos de su uso en estas zonas.
Son aptos para todo tipo de pieles aunque son perfectos para pieles secas que sufren de flacidez y arrugas.
Se pueden usar de forma diaria, tanto de día como de noche. Y en sus fórmulas, suelen combinarse con otros activos hidratantes y antioxidantes como la vitamina C y E o el ácido hialurónico.
Si hablamos de la marca PRAXIS, contamos con nuestra propia línea de proteoglicanos dirigida a ofrecer un proteoglicano para cada tipo de piel.
Encontramos los proteoglicanos Classics que constituyen la fórmula más hidratante.
También contamos con los proteoglicanos Vit C Plus que ofrecen mayor porcentaje de vitamina C por lo que son antioxidantes e iluminadores.
Por otro lado, pensando en las pieles mixtas y grasas o en aquellas que prefieren las texturas más ligeras, existen los proteoglicanos Oil Free.
Y como no podíamos olvidarnos de ellos, contamos también con los proteoglicanos For Men, formulados para hombres.
¿Te has decidido ya a incluir los proteoglicanos en tu rutina de cuidado? Sí es así, elige el formato que más te convenga y empieza a notar sus beneficios desde el principio.