¿Es cierto que la Vitamina C mancha la piel? Desmontando el mito a través de la ciencia.
¿Alguna vez has dudado sobre si usar Vitamina C en tu rutina facial por miedo a manchar tu piel? Tranquila, es normal ya que la afirmación de que la Vitamina C mancha la piel, es un mito muy común en el mundo del skincare. Esta cuestión circula en redes sociales y foros de belleza pero, ¿es cierta? ¿Puede un ingrediente tan beneficioso para la piel ser perjudicial? La respuesta corta es NO, sigue leyendo para descubrir el porqué.

El uso de la Vitamina C en cosmética
En el mundo de la cosmética, la Vitamina C se encuentra en diversos formatos: sérum, crema, mascarillas o ampollas, siendo esta última opción la más popular por su alta concentración y rapidez de absorción. El formato en ampolla es ideal para este ingrediente ya que sella el producto y evita que éste se oxide.
En cosmética, se recomienda aplicar la Vitamina C por la mañana antes del protector solar para potenciar su efecto antioxidante y proteger la piel de los daños radicales como los rayos UVA y la contaminación. Aunque tradicionalmente se recomienda por la mañana, también es correcto utilizarla por la noche ya que ayuda a la regeneración celular que se produce en este momento del día.
Los beneficios reales de la Vitamina C
La Vitamina C es un antioxidante poderoso con múltiples beneficios para la piel. Su gran capacidad para combatir los radicales libres, la posiciona como un ingrediente esencial en el cuidado facial. Sus principales beneficios son:
- Ilumina el rostro y ayuda a reducir la hiperpigmentación. Uno de los efectos más notables de la Vitamina C es la luminosidad y el tono uniforme que deja en la piel. Ayuda a reducir manchas oscuras, hiperpigmentación o cicatrices de acné. El uso constante de este ingrediente da como resultado una piel más luminosa y un tono más uniforme.
- Estimula la producción de colágeno. El colágeno es una proteína clave que mantiene la piel firme, elástica y joven. Con el paso del tiempo, la producción del colágeno disminuye. Esto da lugar a las arruguitas y a la flacidez en el rostro. La Vitamina C desempeña un papel crucial en la síntesis de colágeno, ayudando a mantener la piel más tersa, firme y resistente al envejecimiento prematuro.
- Proteger contra el daño solar y los radicales libres. La Vitamina C, no sustituye al protector solar, sino que actúa como una defensa adicional contra los daños causados por la radiación ultravioleta. Sus propiedades antioxidantes neutralizan los radicales libres generados por la exposición al sol, contaminación u otros factores.

Desmontando el mito de la Vitamina C
Este mito proviene principalmente de estos dos factores:
- La Vitamina C se oxida: La vitamina C es un producto fotosensible, lo que significa que se degrada cuando se expone a la luz y el aire, perdiendo efectividad con el tiempo. Sin embargo, esto no quiere decir que cause manchas en la piel. Para preservar el producto es recomendable que se guarde en un lugar fresco y cerrar bien el envase en cada uso para evitar que la vitamina c pierda sus propiedades.
- El uso incorrecto de la Vitamina C con la exposición solar: La vitamina C no es fotosensensibilizante, es decir, no hace que la piel se vuelva más sensible al sol. De hecho, su uso junto con el protector solar, potencia la defensa contra los rayos UV. Sin embargo, si no usas protección solar, los rayos UV pueden causar manchas por sí mismos, independientemente de que hayas usado o no, Vitamina C.

¿Cómo usar correctamente la Vitamina C? La guía definitiva sobre su uso:
- Úsala en tu rutina de la mañana. Su uso por la mañana es ideal ya que actúa como una barrera protectora contra los radicales libres y la contaminación exterior, además de unificar el tono de la piel y estimular la producción de colágeno.
- Almacénala correctamente. Para evitar que se oxide y prolongar su vida útil. Guárdala en un lugar fresco, lejos de la luz y el calor. El formato en ampollas de los Proteoglicanos Vit C Plus de Laboratorios Praxis es ideal ya que conserva la Vitamina C fresca y efectiva por más tiempo. Al contener pequeñas cantidades de producto en envases individuales y sellados, se minimiza su exposición al aire y a la luz, evitando su oxidación. Si en algún caso se observa que el color ha cambiado y el olor es diferente, eso nos indicará que la Vitamina C ha perdido su efectividad.
- Combina la Vitamina C con el protector solar siempre. Una vez aplicada la Vitamina C, el último paso de la rutina facial sería el uso del protector solar. Puedes usar la crema ProteoSunscreen SPF50+. En combinación con la Vitamina C, no solo protegerá tu piel del envejecimiento prematuro, sino que también la mantendrá más luminosa y uniforme. ¡Úsalos juntos y maximiza sus beneficios!

Ahora que ya sabes la verdad, no dejes que un mito te aleje de tener una piel más luminosa y saludable. ¡Empieza a usar tu Vitamina C sin miedo y aprovecha todos sus beneficios!